viernes, 10 de julio de 2009

"El verdadero golpe en Honduras lo dio Mel Zelaya"

Nota de la editora: Texto copiado de Periodista Latino.
09.07.09 10:27. Archivado en Honduras

Por Luis A. Balcarce

(PD).- Honduras se ha rebelado contra un populista autoritario y liberticida, marioneta de Chávez y 'camarero' de los Castro. Según Eneas Biglione, director ejecutivo del Hispanic American Center for Economic Research (HACER) en Washington, el verdadero golpe en Honduras lo dio Zelaya. Y es que el presidente "quería repetir lo hecho por Chávez en Venezuela": conseguir su reelección indefinida, reemplazar al Congreso por una Asamblea Popular y amordazar a los medios.
¿Quién ha dado el "golpe" primero? ¿Zelaya o Micheletti?
El único golpe que tuvo lugar el pasado domingo 28 de Junio fue dado por José Manuel Zelaya al desafiar el Estado de Derecho de su país, poniendo en peligro los llamados “artículos pétreos” (o inamovibles) de la Constitución de la República de Honduras, entre los que se establece expresamente la prohibición de que el titular del Poder Ejecutivo sea reelecto en su cargo (Artículo 4) y que el Congreso sea reemplazado o modificado de alguna manera (Artículo 193).
La Corte Suprema de Justicia se limitó a poner en manos de las Fuerzas Armadas el cese inmediato del titular del Poder Ejecutivo en su cargo, tal cual lo establece la Constitución Nacional en sus artículos 239 y 272. La confusión inicial de los medios internacionales tiene que ver en parte con una profunda ignorancia de lo que la letra de la Constitución Hondureña establece y en parte, con una obediencia casi religiosa de los dictados del presidente Hugo Chávez y sus cómplices alrededor del mundo.
Suena a chiste escuchar a un golpista como Chávez o un dictador como Castro reclamar "el regreso de la democracia en Honduras". ¿Han sido los grandes derrotados con este golpe?
Está muy claro que a partir de lo ocurrido en Honduras se ha podido determinar claramente quién es quién a nivel mundial. Por un lado, estamos las personas que creemos incondicionalmente en los beneficios de la libertad, la democracia y el Estado de Derecho, y por el otro, el grupo que dice apoyar el “socialismo del siglo XXI” en cualquiera de sus causas, mas allá de sus claros vínculos con grupos terroristas, narcos y países que violan tratados de no proliferación de armas de destrucción masiva.
¿Para qué quería Zelaya reformar la Constitución?
Zelaya quería repetir lo hecho por Hugo Chávez en Venezuela: conseguir su reelección indefinida, reemplazar al Congreso por una Asamblea Popular, comprar la mayoría de los votos en la Corte Suprema y finalmente amordazar a los medios de prensa. Pero se encontró con un pueblo que realmente valora y defiende su régimen constitucional y la importancia de la división de poderes a toda costa.
Lo que muy pocos se preguntan es, ¿cuál es la importancia estratégica de Honduras en los planes de Chávez? Y la respuesta tiene que ver con la cantidad de drogas ilegales que ha venido ingresando de manera clandestina a Honduras en aviones venezolanos en los últimos tiempos para luego ser transportada a los Estados Unidos y Europa. Precisamente este último hecho explica la tenacidad y el enorme monto de dinero gastado en manifestaciones de los “supuestos seguidores de Zelaya” y la significativa cantidad de artículos de opinión difundidos por los enemigos de la libertad a nivel internacional. En el fondo, la idea era sumar a Honduras al bloque de países que realizan operaciones ilegales para Venezuela y sus aliados no occidentales.
¿Cree que esta reacción de los hondureños frente al populismo chavista tendrá un efecto dominó en Latinoamérica?
La crisis Hondureña constituye sin dudas una fuente de inspiración para todos aquellos grupos de la sociedad civil de Argentina, Bolivia, Ecuador, Cuba, Venezuela, Guatemala, Nicaragua y Paraguay, cuyos derechos, libertades y Constituciones han venido siendo violados sistemáticamente desde que dio inicio la “revolución” socialista desde el palacio de Miraflores y que sólo busca poner la suma del poder público y el severo control de los medios en manos de una sola persona.
El tamaño del impacto será directamente proporcional a los niveles de transparencia y compromiso de cada sociedad. Las sociedades más corruptas minimizarán la importancia del hecho, las más virtuosas podrán aprender mucho y sabrán actuar en consecuencia.
Micheletti ha denunciado movimientos de tropas en la frontera nicaragüense; ¿hay riesgo de algún tipo de enfrentamiento? ¿De ser así, cree que los países de la OEA se atreverán a intervenir?
Lamentablemente el riesgo de invasión continúa latente. El mismo domingo 28 de Junio, un gran número de militares venezolanos y nicaragüenses intentaron ingresar a Honduras por la frontera con Nicaragua, pero fueron detenidos por una combinación de esfuerzos de las fuerzas armadas y los ciudadanos locales. Hugo Chávez ha amenazado públicamente al pueblo de Honduras en repetidas oportunidades. Cualquier cosa puede esperarse de quien tortura a su propio pueblo sin el mas mínimo cargo de conciencia.
Al parecer la protección de la soberanía del pueblo de Honduras y el principio de no intervención, están siendo ignorados de manera flagrante. Hoy le tocó el turno al pueblo de la República de Honduras y si la comunidad internacional no dice nada, el día de mañana podría tocarle a cualquier otro país.
La contundencia de las medidas de la OEA contra el nuevo gobierno de Honduras ha generado críticas de parcialidad. ¿Ha mostrado una doble vara de medir la OEA en comparación con la flaqueza del organismo cuando ha habido violaciones de la democracia en otros países?
Resulta más que preocupante que a los pocos días que la OEA premia al régimen cubano reincorporándolo incondicionalmente entre sus filas (una dictadura sanguinaria de 50 años de antigüedad), José Miguel Insulza decide tomar cartas de manera personal en el caso de Honduras.
Todo esto sólo ha logrado envilecer aún más la seriedad y el profesionalismo de un organismo internacional que debiera actuar objetivamente. En muchos países del mundo ya están proliferando los pedidos de renuncia de Insulza, quien rechazó el diálogo con Roberto Micheletti y quien ha solicitado públicamente “todo el tiempo que sea necesario” para que Cuba regrese a la democracia aduciendo que “no hay que intentar imponer soluciones o crear una agitación o un proceso conflictivo dentro de Cuba”.
La administración Micheletti decidió retirar a Honduras de la OEA a raíz de las pretensiones de Insulza de “negociar” la decisión de la Corte Suprema de Justicia y consecuentemente de ignorar la soberanía de su país.
Gobiernos populistas en Venezuela o Bolivia y ahora golpes militares; ¿hay algún peligro de volver a la Latinoamérica de los sesenta?
La actual situación continental guarda demasiadas similitudes con la Guerra Fría y eso es todo un problema. El coste de la “fiesta chavista” en materia de recursos es incalculable y urge poner un freno inmediato a toda la corrupción y a la ambición desmedida de dinero y poder.
En este aspecto debemos distinguir entre dos grupos de países: aquellos que han adoptado recientemente reformas constitucionales que han quitado el poder de manos de la gente para concentrarlo en manos de sus gobernantes, que han eliminado intencionalmente los mecanismos de contralor y remoción de funcionarios públicos en casos de corrupción o pérdida de legitimidad y que favorecen a determinados grupos políticos o étnicos; y aquellas repúblicas cuyas constituciones hacen hincapié en la importancia de la división de poderes y el principio fundamental de que son los ciudadanos quienes delegan su soberanía y poder en manos del gobierno y no al revés.
Los ciudadanos de los países del primer grupo corren hoy en día un grave peligro y podrían reclamar urgentemente una reforma constitucional o eventualmente deberán salir a las calles a recuperar su soberanía. Al respecto, no se recuerda en la historia de la humanidad una tiranía que no haya llegado a su fin. Entre los ciudadanos del segundo grupo encontramos por ejemplo a la República de Honduras que ha sabido dar un paso muy importante y de una manera totalmente legítima: demandando el respeto de su Constitución Nacional y la legislación vigente, demostrando así que la esperanza existe y que trabajando unidos podemos tener países a los que amar y respetar

El "Nobel del papilomavirus" pide vacunación universal de hombres y mujeres

Nota de la editora: Texto copiado de elmundo.es SALUD


Portada > Salud > Cáncer


NUEVOS ESTUDIO EN 'THE LANCET'

Los expertos recuerdan que la medida es inviable desde el punto de vista económico

Los varones también son portadores del virus y vacunarles frenaría su expansión (Foto: Roberto Pérez) Actualizado martes 07/07/2009 01:03 (CET)

Por MARÍA VALERIO

MADRID.- Harald zur Hausen descubrió en la década de los setenta que un virus de transmisión sexual estaba detrás de uno de los tumores más frecuentes en las mujeres, el de cuello de útero. Casi cuarenta años después, este científico alemán vuelve a estar de plena actualidad.
Primero por la decisión del jurado del Nobel de Medicina de otorgarle el galardón este año como 'padre del papilomavirus' junto a los descubridores del virus del sida. Después, por la sombra de sospecha que se extendió a dos miembros del jurado que le otorgó el premio, que al parecer tenían relaciones con una compañía farmacéutica. Ahora, defiende en las páginas de la revista 'The Lancet' la vacunación universal de hombres y mujeres para combatir el virus que él mismo descubrió.
Ha sido en un artículo que firma junto a Karin Michels, de la Universidad de Harvard (EEUU), donde zur Hausen defiende que los varones deben compartir con las mujeres la tarea de erradicar este virus de transmisión sexual (que son en realidad más de 100 subtipos diferentes, sólo un puñado de ellos con capacidad para causar un tumor). Una erradicación que, augura, "podría lograrse en unas pocas décadas".
El virus del papiloma humano es el causante del 70% de los tumores que sufren las mujeres en el cuello del útero (también llamado cérvix). Aunque se calcula que el 80% de la población sexualmente activa (incluidos los hombres) sufrirá esta infección en algún momento de su vida, en la mayoría de los casos el problema remite por sí solo, sin que el portador se entere en muchas ocasiones. En los varones, el virus también puede causar un pequeño porcentaje de tumores de pene, ano o de la cavidad oral, aunque lo más habitual es que provoque simplemente verrugas genitales.

Citologías periódicas


Sin embargo, en otro 20% de los casos, el virus se hace fuerte, la infección persiste y empiezan los problemas. En ocasiones en forma de las citadas verrugas genitales, y en otras como una lesión precancerosa (neoplasia cervical intraepitelial, de grado 2 o, en el peor de los casos de grado 3) que evoluciona hacia un tumor si no se detecta y trata a tiempo en las revisiones ginecológicas.
Todo este proceso es el que pretenden evitar las dos vacunas contra el papilomavirus que tanto han dado que hablar desde su implantación: Gardasil, de Sanofi Pasteur; y Cervarix, de GlaxoSmithKline. Ambas autorizadas en España.
Precisamente coincidiendo con los resultados de una de estas vacunas (Cervarix, del laboratorio GlaxoSmithKline) que se acaban de publicar en las páginas de la revista 'The Lancet' (donde se ratifica que la terapia tiene una eficacia del 98%), zur Hausen insiste en que no se logrará erradicar completamente la infección por papilomavirus si no se incluye en los programas de vacunación a los varones, portadores y transmisores del virus durante las relaciones sexuales.
El argumento del editorial es sencillo: "El objetivo principal de un programa de inmunización debe ser frenar la expansión de la infección. Con los actuales proyectos que se dirigen a las jóvenes de 11 a 26 años antes de su primera relación sexual, se reducirá la incidencia de cáncer cervical en unas pocas décadas. Sin embargo, este subgrupo de población es demasiado pequeño para limitar la expansión del virus. Por eso, el único medio efectivo sería vacunar también a la otra mitad de la población sexualmente activa: los varones".
Cuestión de números
Para apoyar su propuesta, el virólogo alemán y su colega americana echan cuentas. "La viruela fue erradicada con éxito hace más de 40 años gracias a un programa mundial de vacunación. Con una prevalencia del 25%-30% en mujeres de 14 a 60 años y una cifra similar en varones, la infección por el papilomavirus humano es hoy en día más frecuente de lo que solía ser el virus de la viruela".
A los editorialistas no se les escapa que el coste de esta medida puede ser "prohibitivo", pero insisten en que los fabricantes de las vacunas podrían reducir significativamente su precio, al tiempo que se desarrollan nuevas inmunizaciones contra un número más amplio de cepas del virus. Además, concluyen, vacunar también a los chicos tendrá especial repercusión en los países en desarrollo, donde la carga que representa este virus es más insostenible (y el acceso a las citologías más difícil).
En este sentido, la doctora María Castro, ginecóloga del Hospital Puerta de Hierro de Madrid reconoce que hay que ser realista y centrar los esfuerzos por el momento en las mujeres, "que son al fin y al cabo las que sufren mayoritariamente el cáncer". Por eso recuerda que, en este sentido, las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud contemplan la vacunación femenina, y sólo cuando ésta haya alcanzado el 80% plantearse incluir también al género masculino; "no antes".
Los estudios epidemiológicos realizados por el Instituto Catalán de Oncología (ICO) en España, señalan que entre el 15% y el 30% de los varones puede ser portador del papilomavirus; "aunque hay oscilaciones según la edad", reconoce Xavier Castellsagué. Como señala este investigador, firmante del trabajo en el 'Lancet' sobre la eficacia de Cervarix, "desde el punto de vista de salud pública, si pudiésemos proteger a hombres y mujeres el impacto en la eliminación del virus sería claramente mayor; pero el problema es que el coste-beneficio de dicha terapia es muy elevada". Sólo cuando las vacunas bajen el precio, concluye, "podría considerarse como una estrategia incluir en los programas de vacunación a los varones".

Los mapas del alma no tienen fronteras

Nota de la editora: El texto de abajo fue copiado de Perspectiva Ciudadana.com

Por Eduardo Galeano

jornada.unam.mx 10-07-2009

Permítanme agradecer esta ofrenda que estoy recibiendo, que para mí es un símbolo de la tercera orilla del río. En esa tercera orilla, nacida del encuentro de las otras dos, florecen y se multiplican, juntas, nuestras mejores energías, que nos salvan del rencor, la mezquindad, la envidia y otros venenos que abundan en el mercado.
Aquí estamos, pues, en la tercera orilla del río, argentinos y uruguayos, uruguayos y argentinos, rindiendo homenaje a nuestra vida compartida, y por lo tanto estamos celebrando el sentido comunitario de la vida, que es la expresión más entrañable del sentido común.
Al fin y al cabo, y perdón por irme tan lejos, cuando la historia todavía no se llamaba así, allá en el remoto tiempo de las cavernas, ¿cómo se las arreglaron para sobrevivir aquellos indefensos, inútiles, desamparados abuelos de la humanidad? Quizá sobrevivieron, contra toda evidencia, porque fueron capaces de compartir la comida y supieron defenderse juntos. Y pasaron los años, miles y miles de años, y a la vista está que el mundo raras veces recuerda esa lección de sentido común, la más elemental de todas y la que más falta nos hace.
Yo tuve la suerte de vivir en Buenos Aires, en los años setenta. Llegué corrido por la dictadura militar uruguaya, y me fui corrido por la dictadura militar argentina.
No me fui: me fueron. Pero en esos años comprobé, una vez más, que aquella prehistórica lección de sentido común no había sido olvidada del todo. La energía solidaria crecía y crece al vaivén de las olas que nos llevan y nos traen, argentinos que vienen y van, uruguayos que vamos y venimos. Y en el tiempo de las dictaduras, supimos compartir la comida y supimos defendernos juntos, y nadie se sentía héroe ni mártir por dar abrigo a los perseguidos que cruzaban el río, yendo para allá o desde allá viniendo. La solidaridad era, y sigue siendo, un asunto de sentido común y por lo tanto era, y sigue siendo, la cosa más natural del mundo. Quizá por eso su energía, la siempreviva, fue más viva que nunca en los años del terror, alimentada por las prohibiciones que querían matarla. Como el buen toro de lidia, la solidaridad se crece en el castigo.
Y quiero dar un testimonio personal de mi exilio en la Argentina. Quiero rendir homenaje a una aventura llamada Crisis, una revista cultural que algunos escritores y artistas fundamos con el generoso apoyo de Federico Vogelius, donde yo pude aportar algo de lo mucho que me había enseñado Carlos Quijano en mis tiempos del semanario Marcha.
La revista Crisis tenía un nombre más bien deprimente, pero era una jubilosa celebración de la cultura vivida como comunión colectiva, una fiesta del vínculo humano encarnado en la palabra compartida. Queríamos compartir la palabra, como si fuera pan.
Los sobrevivientes de aquella experiencia creadora, que murió ahogada por la dictadura militar, seguimos creyendo lo que entonces creíamos. Creíamos, creemos, que para no ser mudo hay que empezar por no ser sordo, y que el punto de partida de una cultura solidaria está en las bocas de quienes hacen cultura sin saber que la hacen, anónimos conquistadores de los soles que las noches esconden, y ellos, y ellas, son también quienes hacen historia sin saber que la hacen. Porque la cultura, cuando es verdadera, crece desde el pie, como alguna vez cantó Alfredo Zitarrosa, y desde el pie crece la historia. Lo único que se hace desde arriba son los pozos.
La dictadura militar acabó con la revista y exterminó muchas otras expresiones de fecundidad social. Los fabricantes de pozos castigaron el imperdonable pecado del vínculo, la solidaridad cometida en sus múltiples formas posibles, y la máquina del desvínculo continuó trabajando al servicio de una tradición colonial, impuesta por los imperios que nos han dividido para reinar y que nos obligan a aceptar la soledad como destino.
A primera vista, el mundo parece una multitud de soledades amuchadas, todos contra todos, sálvese quien pueda, pero el sentido común, el sentido comunitario, es un bichito duro de matar. La esperanza todavía tiene quien la espera, alentada por las voces que resuenan desde nuestro origen común y nuestros asombrosos espacios de encuentro.
Yo no conozco dicha más alta que la alegría de reconocerme en los demás. Quizás ésa es, para mí, la única inmortalidad digna de fe. Reconocerme en los demás, reconocerme en mi patria y en mi tiempo, y también reconocerme en mujeres y hombres que son compatriotas míos, nacidos en otras tierras, y reconocerme en mujeres y hombres que son contemporáneos míos, vividos en otros tiempos.
Los mapas del alma no tienen fronteras.
(Palabras dichas por Eduardo Galeano en Montevideo, anoche, al ser condecorado con la Orden de Mayo de la República Argentina.)